Escarcha.
El dia a comenzado tarde.
La luz del sol pega finos roces con mis cabellos cada dia mas claros y empapa la piel cada dia mas imponente. Logro entre-abrir mi ojo derecho mareado... Que hay? Me pregunta un zancudo que chupaba mi sangre cual colado en un festin gratis. Que hay? Contesto sin animo alguno.
Tardo en reaccionar. Mis sentidos eran tan lentos como los sonidos provenientes de la calle casi en paz. Una hora mas y me hubiese evaporado. Una maldita hora mas...
Las cosas vinieron mecanicas... hasta mi respiracion. Ya no sentia la necesidad, pero debia hacerlo. No era posible que por inhalar y exhalar debidamente fuesen a armarme tremendo escandalo nacional. Asi era esto del buen ciudadano y sus obligaciones. Donde habia dejado mi pena apasionada?... Talvez los zancudos la chupaban lentamente. Talvez todo era parte de un plan gubernamental. Habian creado nuevos mini-robots en forma de bichos, para acabar con las ganas de la gente, con las ideas y necesidad de rebelacion. Talvez... y solo talvez, habia llegado el fin de una epoca de peripecias. La plenitud era ahora una realidad amorfa... amoldable y tetricamente de unos cuantos que hacian creer que eras feliz...
(Los delirios comenzaban a afectarme...)
7.14de la mañana, y yo seguia tratando de conciliar nuevamente el sueño... aquel oportuno bicho habia logrado transformarme en lo que normalmente me llega hasta las 2.30 de la tarde: un maniaco-obsesivo-misogino-antisocial... y por si fuera poco, un fumador de cigarros baratos sin remedio... la crisis pegaba cada vez que encontraba lugar.
7.25 am. el cafe ya estaba listo para ser servido... y el mata-bichos para ser usado. Un zumbido, dos, cinco... diez y... donde has quedado?!? ... realmente necesito encontrar un hobbie... y a ese zacundo que justo se escondio asustado por mi furia.
Prepare mi desayuno: una suculenta taza de avena y salvado de trigo, con media manzana y pan tostado por un lado... Esto del nutriologo me volvia loco, pero era eso o morirme de un colesterol que me habia tomado por sorpresa. Despues de un micro-momento de rebeldia opte por seguir las indicaciones del Dr. Rayo de luz al Amanecer. (Sus padres habian sido hippies, lo cual llevo a que concibieran a su primogenito en una combie abandonada a las orillas del oceano pacifico, y por ende, a obsequiarle ese -tan especial- nombre). Siempre habia pensado que esto del amor y la paz no eran nada mas que un mito que se habia creado originalmente para darle un poco de personalidad a los sesentas; estaba ya tan acostumbrado a la sociedad monotona y comoda, que me costaba bastante trabajo el creer que alguien habia tomado la iniciativa un dia y de repente decidio vestirse coloridamente, dio cominezo a fumar pipas pacificas, y empezo a viajar sin rumbo alguno en busqueda del nirvana. No. La gente ya no sentia como antes, las percepciones se habian modificado... y la avena -tan desgraciada- ya estaba a punto de enfriarse...
Mejor dejaba a un lado mis viajes mañaneros, y dedicaba mi tiempo a la higiene personal. Valía mas apurarme. La oficina me esperaba dentro de 40 minutos...
(To Be Continued)
Bot.Ognion
La luz del sol pega finos roces con mis cabellos cada dia mas claros y empapa la piel cada dia mas imponente. Logro entre-abrir mi ojo derecho mareado... Que hay? Me pregunta un zancudo que chupaba mi sangre cual colado en un festin gratis. Que hay? Contesto sin animo alguno.
Tardo en reaccionar. Mis sentidos eran tan lentos como los sonidos provenientes de la calle casi en paz. Una hora mas y me hubiese evaporado. Una maldita hora mas...
Las cosas vinieron mecanicas... hasta mi respiracion. Ya no sentia la necesidad, pero debia hacerlo. No era posible que por inhalar y exhalar debidamente fuesen a armarme tremendo escandalo nacional. Asi era esto del buen ciudadano y sus obligaciones. Donde habia dejado mi pena apasionada?... Talvez los zancudos la chupaban lentamente. Talvez todo era parte de un plan gubernamental. Habian creado nuevos mini-robots en forma de bichos, para acabar con las ganas de la gente, con las ideas y necesidad de rebelacion. Talvez... y solo talvez, habia llegado el fin de una epoca de peripecias. La plenitud era ahora una realidad amorfa... amoldable y tetricamente de unos cuantos que hacian creer que eras feliz...
(Los delirios comenzaban a afectarme...)
7.14de la mañana, y yo seguia tratando de conciliar nuevamente el sueño... aquel oportuno bicho habia logrado transformarme en lo que normalmente me llega hasta las 2.30 de la tarde: un maniaco-obsesivo-misogino-antisocial... y por si fuera poco, un fumador de cigarros baratos sin remedio... la crisis pegaba cada vez que encontraba lugar.
7.25 am. el cafe ya estaba listo para ser servido... y el mata-bichos para ser usado. Un zumbido, dos, cinco... diez y... donde has quedado?!? ... realmente necesito encontrar un hobbie... y a ese zacundo que justo se escondio asustado por mi furia.
Prepare mi desayuno: una suculenta taza de avena y salvado de trigo, con media manzana y pan tostado por un lado... Esto del nutriologo me volvia loco, pero era eso o morirme de un colesterol que me habia tomado por sorpresa. Despues de un micro-momento de rebeldia opte por seguir las indicaciones del Dr. Rayo de luz al Amanecer. (Sus padres habian sido hippies, lo cual llevo a que concibieran a su primogenito en una combie abandonada a las orillas del oceano pacifico, y por ende, a obsequiarle ese -tan especial- nombre). Siempre habia pensado que esto del amor y la paz no eran nada mas que un mito que se habia creado originalmente para darle un poco de personalidad a los sesentas; estaba ya tan acostumbrado a la sociedad monotona y comoda, que me costaba bastante trabajo el creer que alguien habia tomado la iniciativa un dia y de repente decidio vestirse coloridamente, dio cominezo a fumar pipas pacificas, y empezo a viajar sin rumbo alguno en busqueda del nirvana. No. La gente ya no sentia como antes, las percepciones se habian modificado... y la avena -tan desgraciada- ya estaba a punto de enfriarse...
Mejor dejaba a un lado mis viajes mañaneros, y dedicaba mi tiempo a la higiene personal. Valía mas apurarme. La oficina me esperaba dentro de 40 minutos...
(To Be Continued)
Bot.Ognion
Comentarios
Y es verdad, ya no se siente como antes, se siente de una manera pensada y limitada, por egoismo que justificamos con temor, por orgullo, que en estos tiempos quizá no convenga. Solo quizá.
Bueno bueno, lo que buscaba el comentario (me dejo llevar por las sensaciones que provocó tu escrito y una verdad es que me gusta expresar lo que pienso y siento), es que me ha encantado tu blog, y llegaré al cliché (porque realmente lo amerita) de pronunciar un gran FELICIDADES.